Esta grabación del Rapto del Serrallo es mítica y muy bien conocida por todos los amantes de la opera y los mozartianos en especial. La dirección de Fricsay es absolutamente fantástica. Lo que se escucha en esta grabación, desde el punto de vista orquestal, es una absoluta delicia de comienzo a fin. El control férreo y perfecto del ritmo, el sorpendente control del rubato y el refinamiento son de absoluta antología. Las grabaciones de las opera de Mozart, por lo demás, son muy famosas, siendo consideradas por muchos especialistas, como un verdadero monumento musical. El cast es excelente también, Maria Stader puede considerarse una de las mejores interpretes de este rol. Su coloratura es incisiva, penetrante, dramática y llena de significado. La densidad tímbrica y lirismo, es dificil de encontrar en otras intérpretes. Ernest H?fliger, fue el tenor favorito de Fricsay y está presente en todas sus grabaciones. Es cierto que Fritz Wunderlich, Leopold Simoneau y Anton Dermota tenian voces mas llamativas, y sus interpretaciones son quizas mas famosas, pero la interpretación de Háfliger es una delicia también. Su estilo es muy espiritual, musical y delicado (hay que recordar que fue alumno del gran Julius Patzak), lo cual es de agradecer en una opera de Mozart. Josef Greindl es el bajo perfecto para el rol de Osmin. Voz potente e impetuosa, de color oscuro y tenebrosa, fraseo inteligente e incisivo. Su Osmin muestra el justo balance entre canto serio y bufo de forma admirable. Rita Streich es una verdadera maravilla como Blonde. Su voz cristalina, penetrante y su estilo de gran naturalidad y musicalidad la hacen imbatible en este rol. Sus arias están cantadas de manera ideal, tanto por voz como por estilo interpretativo. Como consecuencia de todo lo dicho, puede decirse que es una versión plenamente recomendable y probablemente una de las mejores de la discografía de esta obra. De todos modos, habría que conocer también las grabaciones de Beecham, Krips, Jochum y Bóhm, que son igualmente magníficas.